
Tres motivos por los que la implementación de gamificación puede fracasar
Según un estudio de Gartner, el 80% de los proyectos de gamificación desarrollados en 2014 fracasarán a consecuencia de una mala implementación. La utilización de mecánicas y dinámicas del juego en ámbitos no lúdicos es un proceso complicado, compuesto por una gran número de factores que serán de los que dependa que el proyecto se convierta en un éxito o un fracaso.
Aunque las posibles causas de que con la implementación de gamificación no se consigan los resultados esperados al inicio del proyecto son muchas, hay tres que revisten una especial importancia.
Mal diseño
Según Gartner los malos diseños serán la principal causa de fracaso en la implementación de gamificación. La gamificación está dirigida a una generación que está altamente familiarizada con el uso de los videojuegos. Los usuarios están cada vez más acostumbrados a interactuar en entornos digitales y las expectativas hacia nuevos productos son cada vez más altas.
Este contexto hace que un sistema de recompensa en sí mismo pierda valor en el sentido de que no logrará retener la atención de los usuarios. El diseño de la plataforma o del videojuego se convierte así en uno de los elementos que determinarán el éxito del proyecto.
Mala implementación
Las mecánicas y dinámicas del juego son los elementos encargados de motivar a los usuarios para que actúen orientándose hacia objetivos propuestos con la empresa. Por ello es necesario que estas mecánicas estén bien definidas y clarificadas.
Los sistema de recompensas ineficientes serán uno de los motivos del fracaso en la implementación de gamificación. Los sistemas de recompensas deben guardar un vínculo con los procesos del negocio en el que se implementan.
Las mecánicas y dinámicas del juego son los elementos que hacen que un juego sea divertido y lo que motiva al jugador a participar y a “engancharse” a la actividad propuesta por la empresa, pero si éstas están mal incentivadas los usuarios abandonarán el juego sin que las organizaciones hayan conseguidos los resultados que esperaban.
Falta de planificación estratégica
La gamificación está encaminada a la consecución de determinados objetivos empresariales. Así, es importante identificar los factores de éxito para incentivar los comportamientos de los usuarios que se esperan.
La mecánica del juego debe, además, estar orientada al público objetivo; es necesario identificar las diferentes personalidades de los usuarios y atender a las necesidades de éstos.
Así, la gamificación debe dirigirse desde un principio a la estimulación de determinados comportamientos que consigan la consecución de los objetivos empresariales. Debe existir un estudio previo que identifique las necesidades del proyecto y que reconozca los diferentes tipos de usuarios y a partir de ahí se debe diseñar un proyecto orientado a resultados.
Fotografía de David D.